¿En qué momento olvidamos lo esencial en la gestión de proyectos? 🤔

Recientemente reflexionaba sobre una situación que, lamentablemente, se está volviendo común: el cliente, quien debería recibir un servicio impecable, termina persiguiendo al project manager para solicitar información o documentación que es parte de su responsabilidad.

Esto plantea una pregunta crítica: ¿Estamos cumpliendo con nuestro rol como gestores de proyectos?

🔑 La gestión de proyectos debería ser sinónimo de:

Proactividad: Anticiparse a las necesidades del cliente, entregando información completa y a tiempo.

Transparencia: Mantener al cliente informado sobre los avances, retos y soluciones.

Responsabilidad: Entender que somos el puente entre el equipo, los objetivos y el cliente. ¡No podemos permitir que este puente falle!

En un sector donde la confianza y la eficiencia son esenciales, estas situaciones deberían ser la excepción, no la norma.

Como profesionales, debemos cuestionarnos constantemente:

¿Estamos escuchando al cliente de forma activa?

¿Estamos entregando (como mínimo) el valor que prometemos desde la firma del contrato?

¿Qué procesos podemos mejorar para recuperar la confianza en nuestra labor?

Abramos el debate: ¿Cómo podemos fomentar una cultura de mayor compromiso en la gestión de proyectos? 🤔

Estoy segura de que, compartiendo experiencias y buenas prácticas, podemos marcar la diferencia y aplicar la mejora continua en todo momento.. 🫡